España es un país donde las franquicias de heladerías funcionan. El clima o la ubicación, entre otros factores, convierten a LLOOLY en una de las más rentables del país, estimando un margen de ganancia de, aproximadamente, el 65%.

LLOOLY, que ha traído a España un nuevo concepto de helados aprovechando la oportunidad que ofrece el mercado, se ha expandido ya con más de 15 centros por España, viene con una original oferta que le ha permitido ganarse un hueco en el corazón de los consumidores. 

Desde su Waffle Bubble (gofre con helado y toppings), pasando por su Ice Roll (rollitos cilíndricos creados sobre una plancha fría para darles forma), hasta su nueva incorporación el Taco Helado (fusión entre el Waffle Bubble y el Ice Roll), su oferta hasta ahora nada popularizada en España le ha convertido en tendencia rápidamente entre el público general.

Además, tiene máquinas heladeras de patente alemana que permiten que sus productos se puedan extender a través del modelo de franquicia, por todo el mundo.

Lo que conlleva suscribirse a esta franquicia

Las personas que decidan sumarse al sistema de franquicias de Llooly, deben saber que pueden hacerlo con una inversión mínima que va desde los 23.000€. La compañía libra a sus franquiciados de del pago de cánones y royalties.

La franquicia puede ser el cualquier local con una capacidad mayor a 8 metros cuadrados. También es importante resaltar que no es necesario pagar campañas de branding debido al reconocimiento tanto en el mercado nacional como internacionalmente.

Una de las ventajas de franquiciarse con Llooly es que se recibe un asesoramiento personalizado y ayuda en la gestión del negocio.

En conclusión, con una rentabilidad que puede llamar la atención de emprendedores e inversores, franquiciarse con Llooly es sinónimo de fácil gestión y con buena posición en el mercado debido a lo innovador del negocio.